¡¿Ya se rompió!? Lamentablemente tenemos que informar que si, ya está roto el asfalto del paso a nivel del Km. 50. Pasó muy poco tiempo y ya se rompió, los vecinos pueden verlo cada vez que pasan por el lugar. ¿Por qué se rompió tan rápido? ¿Malos materiales? ¿Deficitaria dirección de la obra? ¿Se resignó calidad en pos de rapidez o economía? ¡El haragán traba dos veces! ¡¡¡Y las dos las pagamos los vecinos!!!
En la calle Ortiz, del B° Los Aromos, se puede observar esta pérdida de agua que, realmente, le complica la vida a los vecinos. El verdín que se forma en el asfalto se torna un peligro para quienes caminan por allí o circulan en bicicleta. ¿Y el Municipio? ¿Los Concejales que viven cerca no ven nada?
El asfalto a la entrada del Hospital ya no da más. Requiere la pronta intervención de la Secretaría de Obras. Desde aquí instamos al Municipio a tomar cartas en el asunto. Los colectivos de Ecotrans, y otros vehículos de gran porte, siguen circulando por allí y profundizarán el problema. No dejemos para mañana...
Los camiones de gran porte siguen estacionándose en la vía pública en el casco urbano. Las dificultades de tránsito son considerables y peligrosas. El exceso de peso va destruyendo el asfalto. Esta imagen es de la calle Rivadia, entre Agüero y José C. Paz. Si el Intendente no hubiera vetado la Ordenanza que presentó el Justicialismo, estos camiones estarían estacionados fuera del casco urbano.
En la esquina de Arias y Vélez Sarsfield se puede ver OTRA pérdida de agua. ¿Y van...? Mientras la política sea de parche y no estructural, seguiremos padeciendo cada pérdida de agua. Este caso, además, es un perfecto caldo de cultivo de mosquitos... ¿Y el dengue?
Y los perros siguen siendo los principales protagonistas de la novela... Quien se acerque a esperar el colectivo al refugio de la plaza principal, podrá constatar como una verdadera jauría de perros acosa a cuanto auto, moto o ciclista se anime a pasar por la calle Sarmiento. Mucho se ha hablado al respecto, tanto se ha escrito, más o menos se ha filmado, pero poco se ha hecho desde el Municipio que tiene que ejecutar la ordenanza correspondiente.
Las cartillas de turismo de nuestra ciudad deberían incorporar al circuito el recorrido de este verdadero túnel de sombras. Es en la calle Suipacha, entre Cullen y Mármol, el lugar es una boca de lobo para el transeúnte ocasional y la sombra permanente no permite que se sequé rápido la calle luego de una lluvia.
El joven repartidor, el "Delivery" como le decimos la mayoría, debe desconocer que hay una ordenanza que prescribe cómo ajustar este servicio a normas aprobadas por unanimidad (Cascos, silenciador en caños de escapes, nombre de la empresa en la moto, etc.) y que quieren evitar consecuencias graves en accidentes de tránsito y problemas de inseguridad para los vecinos que requieran algún pedido. Las empresas también deben saber la legislación vigente y promover su cumplimiento.
El transeúnte desprevenido puede llegar a pensar, al pasar por la esquina de Independencia y Arias, que está camino a la Colonia Gutiérrez, que lo que está viendo es el basurero municipal a cielo abierto a la vera del acceso Zabala, pero no es así, esto está a 3 cuadras de la plaza principal de nuestra ciudad... ¡Sin comentarios!
En un pedido de informes se le preguntó al Departamento Ejecutivo cuál fue el destino de los materiales recuperados de la demolición de la ex estación de servicio de la esquina en la Ruta 40 e H. Irigoyen. Aún no fue contestado. ¿A cuánto ascendería el valor del material no utilizable?...
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