Desde el 25 de Mayo de 2003 hasta el 10 de Diciembre de 2007 e inclusive hasta sus últimas horas el Compañero Néstor Kirchner ha tenido una prolífica obra que lo ha convertido en, sin lugar a dudas, el político más importante de los últimos tiempos en la Argentina.
Tal es así que el Presidente del Brasil, Lula, ha definido que Néstor "Marcó el camino de una Argentina próspera y soberana".
Haciendo un pequeño viaje a través del tiempo, no podemos encontrar que son muchas las medidas adoptadas que han beneficiado al pueblo argentino.
De esta forma podemos recordar que uno de los mayores logros del gobierno de Kirchner fue la reinstalación de la discusión paritaria como una herramienta de la clase obrera, que había instalado Perón, y que en los últimos años permitió recobrar el poder adquisitivo de los asalariados, junto con la derogación de las leyes de "Flexibilización laboral" y la puesta en marcha del Consejo del Salario.
Dejó al país con grandes reservas en el Banco Central y puso en marcha una política de no endeudamiento, lo que mejoró las condiciones económicas del país.
Otros de los hitos importantes en su gestión ha sido la anulación de las Leyes de Obediencia Debida y el Punto Final, con lo cual provocó la reapertura de los juicios contra la última dictadura militar, como único camino para encontrar definitivamente la reconciliación nacional osea, con justicia y memoria y no con olvido. Famosos son los momentos en los cuales por un lado el Presidente Kirchner pide "Perdón en nombre del Estado Argentino" por los crímenes cometidos, por otro el retiro de los cuadros de los dictadores Videla y Bignone del Colegio Militar, como así también la creación del "Museo de la Memoria" en dependecias del Centro de Detención y Torturas de la ESMA
Se destruyó la denominada "Mayoría automática" en la Corte Suprema de Justicia, depurando a sus miembros, lo que ha determinado un Poder Judicial totalmente independiente del Poder Político, cosa que inclusive le trajo a el más de un "dolor de cabeza"
Ordenó la apertura de los archivos de la SIDE sobre el atentado contra la AMIA para ponerlos al servicio de la justicia. De esta forma, luego de años de un proceso viciado de irregularidades que estancaron la causa consagrando la impunidad, familiares y amigos de las víctimas, así como todo el pueblo, recuperaban la esperanza de que los responsables de la masacre rindieran cuentas ante la justicia.
Un hecho sin precedentes en nuestra historia y también en el mundo ha sido la negociación de la deuda externa, pagando la deuda al FMI y poniendo fin al monitoreo imperialista sobre nuestra economía. "El país no pagará su deuda a costa del hambre ni la exclusión de los argentinos", prometió el flamante Presidente ante el Congreso, minutos después de recibir la banda presidencial. La adhesión al canje alcanzó al 76,06% y el 3 de Enero de 2006 el Presidente de la Argentina cancelaba toda la deuda con el FMI. En esos años, la economía se expandió a "Tasas chinas", que rondaban los nueve puntos porcentuales, y en 2007 la tasa de desempleo cayó a un dígito por primera vez en 13 años.
Junto con otros líderes latinoamericanos provocó el hundimiento del ALCA norteamericano a favor de la creación de la UNASUR y la integración de toda América Latina.
También reconvirtió un sistema de valorización financiera por otro de acumulación productiva, provocando una fuerte baja en la desocupación, en la pobreza y en la indigencia. E impulsó la consolidación de dos pilares fundamentales para el cambio y el progreso social: La intervención del Estado y el protagonismo de los trabajadores a través de la CGT.
Deben dimensionarse también la trascendencia que tuvieron para los sectores populares medidas como la Ley de Financiamiento Educativo.
Al momento de su asunción, la estructura productiva en el país era inexistente y el índice de desocupación superaba con creces el 20% y el 47% de la población estaba sumergida en la pobreza, mientras que otro 19% naufragaba en la indigencia.
En el 2003, Néstor Kirchner, se dio cuenta que la única forma de sobrevivir a la jauría de tecnócratas, banqueros, empresarios y sindicalistas desclasados y burócratas, era recuperar la gobernabilidad económica y reconstruir las bases productivas del país. El proceso de crecimiento estuvo signado por el rol protagónico y rector del Estado. Esto impidió que los frutos de la recuperación del país quedaran en manos de un puñado de empresarios y ejecutivos, como había ocurrido en la era del capitalismo cavernícola y depredador.
Los argentinos, en lugar de irse en masa al exterior para buscar un salvataje, regresaban a sus pagos con la intención de poner un granito de arena y reencontrarse con los familiares y amigos. El crecimiento y la producción dieron lugar a un ciclo positivo que mejoró la recaudación impositiva y permitió poner en marcha un ambicioso plan de obras para reconstruir la inversión pública que en tan solo cuatro años superó los $45 mil millones.
Los empresarios también vieron los frutos de estas políticas ya que, con un país pujante y previsibilidad para hacer negocios, lograron la rentabilidad perdida. La industria y la agroindustria jugaron un papel clave en el nuevo modelo económico que diseñó Néstor Kirchner.
El nuevo rol del Estado permitió relanzar proyectos que habían sido sepultados por la crisis y la vieja y perimida idea de que todo debe quedar en manos del sector privado. Entonces, se empezaron a construir escuelas, se retomó el plan de obras viales, las inversiones en cloacas y agua potable y el plan nuclear, que la Argentina había desarmado por las presiones externas.
Entre el 2003 y el 2007, las Reservas del Banco Central aumentaron a pasos agigantados a merced al fuerte crecimiento del sector primario, que contó, sin duda, con un viento externo favorable pero que también tuvo un tipo de cambio competitivo, que también impulsó al sector industrial.
Se verificó un crecimiento generalizado en todos los sectores. En el período se abrieron 24 mil nuevas pymes industriales, se crearon más de 1 millón de empleos industriales, de los cuales 650 mil fueron gracias a las pymes. Las empresas triplicaron su nivel de rentabilidad, que pasó del 4,7% al 13,5%, al tiempo que la productividad creció a un ritmo anual del 5%.
Por su lado, las exportaciones industriales fueron récord, alcanzando el 6,5% del PBI y triplicando la proporción de los '90.
Los datos muestran que crecieron todos los sectores industriales. Encabeza esa expansión el sector automotriz, con el 287%.
Por su parte, el sector de la construcción fue uno de los primeros en reaccionar positivamente al nuevo ciclo expansivo que impactó en los precios de los inmuebles.
Asimismo, se dio un incremento pronunciado de la producción de maíz y soja, impulsado en parte por los elevados precios internacionales. El primero pasó de las 15 millones de toneladas, en la campaña 2002-2003, a las 46,2 millones de toneladas al final del mandato de Kirchner, con un crecimiento del 32%.
Allá por 2003, durante el primer año de gestión del gobierno de Néstor Kirchner, los montos destinados a la obra pública habían sido de 1.897 millones de pesos.
Cuatro años después, en 2007, esa cifra se había incrementado un 850% en una muestra contundente de la orientación social de la gestión. En esos cuatro años destinó un total de $45 mil millones a obras de inversión pública.
El incremento del presupuesto y la inversión presentó un claro sesgo en favor de cada uno de los sectores que generaran un desarrollo del mercado interno, bienestar popula o la infraestructura necesaria para dar impulso a la industria, la generación de valor agregado y el empleo.
A modo de ejemplo, en el sector energético las inversiones escalaron desde los $ 131 millones en 2003 hasta los 2337 millones de pesos en el 2007. Las obras de infraestructura vial, por su parte, recibieron una inversión de 477 millones de pesos en el primer año de gestión para llegar a los 5353 millones de pesos en el 2007. En lo que a obras de agua y vivienda se refiere, el salto en el período fue desde los 1056 millones de pesos a los 6540.
Bajo la misma gestión de Néstor Kirchner se dio inicio al plan "700 escuelas" que se llegó a completar en esos años en un 60% y que por su envergadura, es el plan de infraestuctura educativa desde la primera y segunda presidencia de Juan Domingo Perón
Se retomaron obras de alto valor estratégico como las relacionadas con el Plan Nuclear: Ataucha II, Ataucha III.
En el año 2006, se inauguró AR-SAT para el desarrollo de la industria nacional de satélites. Durante la gestión y a partir de esas inversiones se realizaron 2.000 km de autopistas, entre ellas la autopista que en breve unirá Rosario y Córdoba. En el mismo período, las inversiones permitieron la recuperación de 2 millones de hectáreas en zonas inundables y se dio acceso al agua potable a un millón de personas.
en fin, mucho se podría hablar de la gestión del Compañero Néstor Kirchner, lo que indudablemente exigiría muchas más páginas que las hasta aquí destinadas, pero una cosa debe quedar muy en claro:
Este hombre, peronista, consiguió torcer un camino signado por el privilegio de intereses externos y que han permitido a unos pocos obtener beneficios inconmensurables a costa de las espaldas de millones de argentinos. estos mismos intereses y personajes son los que hoy "patalean" para que todo vuelva a ser como fue.
Indudablemente, su tiempo terrenal no le ha alcanzado para completar esta obra faraónica, pero no nos preocupemos los argentinos, pues su camino es y será continuado por quien ha sido la compañera de toda su vida, la Señora Presidenta Cristina Fernandez con el apoyo incondicional del pueblo argentino.
. Además en el 2003, se generaron 20 mil soluciones habitacionales (refacción u otorgamiento) que se multiplicaron por cinco en el 2007.
